Robots y ciberseguridad, el futuro de la industria
13 de Enero de 2022El sector de la robótica, cada vez más asentado por el auge de la automatización, intenta revertir la inseguridad y vulnerabilidad ante ataques digitales.
Las fábricas inteligentes son una realidad. El avance de la digitalización en la industria ha provocado un incremento en la implantación de nuevos sistemas de automatización.
Se multiplican los entornos industriales donde los robots son fundamentales y se relacionan de tú a tú con los humanos en un entorno hiperconectado.
España, entre los 10 países del mundo con más autómatas, cuenta con 16 robots por cada 1.000 trabajadores, según cifras de la Federación Internacional de Robótica. De hecho, según afirma la compañía española de ciberseguridad Alias Robotics, basándose en estimaciones del Foro Económico Mundial, el número de robots será equiparable al de trabajadores humanos para 2030.
Las ventajas que supone el uso de robots en líneas de producción, cadenas logísticas y cualquier tipo de actividad son obvias. Pero también lo son los riesgos, en términos de seguridad, y la necesidad de tomar medidas respecto a las amenazas a la que están expuestos los dispositivos digitales.
Después de haber atendido a decenas de clientes en robótica, solo el año pasado el equipo técnico de Alias Robotics detectó más de 100 vulnerabilidades en diferentes robots.
Estas vulnerabilidades podrían afectar tanto el ámbito económico del usuario (al paralizarse la producción), como el de la propia seguridad física (accidentes derivados de ataques a robots). Además, un robot industrial puede convertirse en la llave para acceder a datos sensibles, como los relacionados con propiedad industrial.
Una “vacuna” para los robots
“La robótica hoy es tan vulnerable como eran los PC a finales de los 80”, dice Endika Gil Uriarte, Chief Strategy Officer (CSO) Alias Robotics. En su opinión, el avance de la Industria 4.0 y de la hiperconectividad “ha atropellado a los sistemas industriales, diseñados para trabajar en entornos aislados”.
Además, “muchos fabricantes de robots se desentienden de los aspectos relacionados con la ciberseguridad”, dice. “Es frecuente que estas empresas escalen muy rápido y vendan una cantidad ingente de unidades en pocos años, pudiendo llegar a perder el control sobre algunos de los sistemas desplegados”, añade.
El objetivo de Alias Robotics es proteger a los robots y sus componentes contra los ataques de terceros eliminando o mitigando estos riesgos. Para ello, colaboran con los fabricantes de robots y los usuarios finales, y ponen a su disposición Robot Immune System (RIS), un antivirus inteligente que protege a los robots de los ciberdelincuentes desde adentro hacia afuera.
RIS ha sido creado por un equipo técnico especializado con más de 10 años de experiencia en robótica y ciberseguridad y “es un antivirus inteligente que se incorpora a los robots para protegerlos a medida que evoluciona y se adapta como el sistema inmunológico humano”, explican desde la startup alavesa.
Este software expone a las máquinas a diferentes amenazas virtuales y prepara a sus sistemas para evitar posibles contagios por parte de virus informáticos. Con la ayuda de la inteligencia artificial aprende a prevenir mejor estas amenazas, así como a identificarlas incluso antes de que ocurran.
Laboratorio de ciberseguridad robótica
Desde diciembre de 2020 Alias Robotics cuenta con el respaldo de Telefónica, que entró en su accionariado a través de Telefónica Tech Ventures. Fruto de este acuerdo estratégico, en septiembre de este año se inauguró el primer laboratorio del mundo dedicado exclusivamente a la innovación en la ciberseguridad robótica.
El laboratorio CS4R, ubicado en las instalaciones del hub de Innovación Wayra en Múnich, permitirá a ambas empresas seguir liderando el sector de la ciberseguridad en robotización dentro de la industria, acercarse a potenciales clientes locales y, en definitiva, continuar ayudando a las empresas a afrontar la próxima oleada digital de forma segura.
Este laboratorio contará con una variedad de robots ampliamente utilizados en la Industria, como los robots colaborativos, los cuales interaccionan directamente con los trabajadores, los robots industriales convencionales y las plataformas robóticas móviles.
Para Vicente Segura, responsable de seguridad IoT en Telefónica Tech, “la industria está experimentando un proceso de transformación digital sin precedentes en el que todos los sistemas, incluidos los robots, deben incorporar los mecanismos de seguridad más avanzados. La ciberseguridad robótica ayuda a las empresas a evitar paradas de producción por ataques sufridos, que pueden conllevar importantes pérdidas económicas y daños reputacionales”.
Legislación y formación
La Unión Europea, cada vez más implicada con la digitalización, ha comenzado a tomarse en serio el asunto y parece que, dentro de su estrategia de ciberseguridad, prepara para 2022 una nueva legislación sobre “ciberresiliencia” destinada a introducir un estándar común de ciberseguridad para su aplicación a los dispositivos conectados.
Otra solución para hacer frente a la inseguridad y las ciberamenazas la encontramos en la formación. Existen ingenieros industriales, programadores, arquitectos de ciberseguridad… pero la robótica es un campo emergente que demanda talentos y perfiles diferentes que nacen de la colaboración científica entre los unos y los otros.
Solo así, conjugando todos estos factores, podremos tener una industria conectada en la que humanos y robots cooperemos y trabajemos de forma protegida y segura. Ese es el futuro.